Granada es un referente tecnológico nacional y no es fruto de la casualidad.
Gracias al esfuerzo realizado por las instituciones y nuestro tejido empresarial, nuestra tierra se ha convertido en el entorno perfecto para atraer empresas de enorme potencia y acoger proyectos tan relevantes como el IFMIF-DONES, ecosistemas como CITAI y PTS, , la fundación AI Granada, el plan estratégico de innovación y Smart City del Ayuntamiento de Granada y un sólido sector tecnológico representado en el Círculo Tecnológico de Granada.
Estamos en el buen camino y uno de los principales indicadores es la apuesta, encabezada por la UGR, por la formación en IA. Es aquí donde surge el mayor reto y oportunidad al que nos enfrentamos no solo las empresas con base tecnológica, sino el conjunto de la sociedad.
La IA supondrá, ya lo está haciendo, una transformación sin precedentes. La incorporación de la IA es una realidad que está cambiando nuestra forma de trabajar y que va a modificar nuestra forma de ver el mundo, relacionarnos, comunicarnos… un nuevo escenario que conlleva incertidumbre y resistencias perfectamente lógicas que hay que abordar con coherencia para avanzar en la dirección correcta.
Sin duda, la deshumanización de los servicios con base tecnológica se está convirtiendo en una de las principales preocupaciones de los usuarios, junto a una brecha digital que en muchos casos se está convirtiendo en un verdadero abismo.
En un entorno cada vez más automatizado y digitalizado, saber mantener la cercanía con el usuario es la mayor oportunidad/reto al que nos enfrentaremos las empresas. Y en este campo, la IA va a jugar un papel fundamental como elemento facilitador o distorsionador, según el uso que hagamos de ella.
La desconfianza y descontento que muestran los usuarios ante la deshumanización del servicio es tal, que las tasas de fuga de los clientes se hacen cada vez mayores haciendo de la fidelización el verdadero caballo de batalla de las corporaciones.
Mantener el equilibrio entre automatización-digitalización-calidez no es fácil, pero es el camino para quebrar el muro de desconfianza imperante. Aquí es donde nace la inteligencia natural.
El calor humano es insustituible y la IA puede complementarlo catapultando la eficiencia de los procesos de atención al cliente al facilitar la generación de respuestas eficientes, satisfactorias y personalizadas a través de su incorporación a los sistemas CRM, acortando y mejorando la gestión de los tiempos de espera de los callcenter o automatizando herramientas impersonales como los chats.
Hay miles de opciones y posibilidades, solo hay que tener claras prioridades y objetivos sin perder de vista la personalidad y esencia del negocio.
En otro orden de cosas, acercar la tecnología a ciertos perfiles de usuario también es un reto ineludible para toda la sociedad y, en este campo, el sector tecnológico juega un papel crucial con una responsabilidad aún mayor si cabe.
En primer lugar, dotar de infraestructuras eficientes de telecomunicaciones a todos los municipios es urgente, sobre todo en las zonas sometidas a expansión empresarial. Sin una red de telecomunicaciones sólida no es posible la digitalización. A nuestro juicio, queda aún mucho por hacer en este campo y las nuevas redes vienen pisándonos los talones.
Como empresa granadina nos enorgullece decir que nuestras cabeceras y sistemas están preparados para suministrar caudales de hasta 100Gb capaces de abastecer edificios completos, pero las infraestructuras de telecomunicaciones de la mayoría de los edificios no están preparadas para absorberlo. Es muy importante que las nuevas edificaciones se planifiquen pensando en la introducción de estos nuevos estándares porque dentro de muy poco será la tónica imperante para un trabajo eficiente.
Las telecomunicaciones no son un tema baladí, son motor de desarrollo y un pilar de crecimiento para el mundo empresarial. Sin conexión a internet estás literalmente muerto. Y, aunque tu resurrección sea solo cuestión de unas horas, esas horas son inadmisibles. Por eso, como referente en el sector de telecomunicaciones nuestro mayor reto es seguir respondiendo a cualquier incidencia de forma inmediata tal y como hemos venido haciendo.
Y no queremos dejar de hablar de la brecha digital que se hace visible en colectivos económicamente vulnerables y en la tercera edad. Se trata de una cuestión que debe abordarse ya. Desde WIBER estamos implicados a través de convenios, como el firmado con el Ayuntamiento de Granada para dotar de conexión a 350 familias granadinas en situación exclusión digital.
Por otra parte, el desarrollo de APP’s y automatizaciones debe realizarse teniendo en cuenta a los mayores ya que el envejecimiento de la población es un hecho. La IA vuelve a entrar al terreno de juego y puede convertirse justamente en la asistencia que el mayor necesita para incorporarse a este mundo digital de una forma plena y nada traumática. Desde asistentes de voz, hasta aplicaciones inteligentes, pasando por inteligencias de carácter pedagógico, la IA abre miles de vías para la integración definitiva de este perfil.
El panorama que se abre ante nosotros con la IA unida a la computación cuántica (más cercana de lo que cabe pensar) y las mejoras en las redes de telecomunicaciones es infinito y aún inimaginable.
Las empresas de base tecnológica tenemos en nuestra mano marcar la tendencia más adecuada y favorable para el progreso económico y social. Afrontemos esta responsabilidad con foco, lógica y espíritu crítico.