Cuando la revolución industrial llegó a España, y durante muchos años después, se primaba la localización de las empresas situándolas lo más cerca posible de los mercados. De ahí el desarrollo industrial del norte de España y el subdesarrollo del sur.
Hoy, los nuevos medios de comunicación han cambiado este esquema: las industrias crecen donde los emprendedores quieren. Pero aún “arrastramos” la herencia de ese pasado que pretería el sur y potenciaba el norte.
Como consecuencia de ello, Granada vive del sector servicios, que representa un 74% del PIB provincial, seguido de lejos por el sector agrícola. El sector industrial sólo contribuye al 10% del PIB, (ligeramente por debajo del sector de la Construcción) y emplea al 13% de la población ocupada. Granada es, hoy, la segunda provincia con menor peso industrial de Andalucía.
Cambiar toda una estructura económica no es fácil. La expansión de un sector suele basarse en un entorno y una cultura fuertemente arraigados, y aunque se estén dando pasos para expandir ese entorno y cultura, este es un proceso que no sucede de la noche a la mañana.
Por parte de los poderes públicos, es necesario insistir en la creación y mejora rápida de infraestructuras, espacios industriales, comunicación, etc. Si pensamos que el arco de autovía mediterránea se completó no hace tantos años con el tramo que abarca la provincia de Granada, o que el tren de alta velocidad aún tiene que luchar con el último tramo de vía lenta justamente en la provincia de Granada, nos damos cuenta de que no ha habido diligencia en la mejora de nuestras comunicaciones.
Es muy importante facilitar la inversión en nuestra provincia. Las exenciones y ayudas fiscales a medio y largo plazo para la instalación de nuevas empresas son imprescindibles. Las empresas recién creadas tardan en arrancar, configurarse y consolidarse, y en este proceso el empresario debe tener la tranquilidad de saber que cuenta con apoyo de las administraciones públicas. Los fondos europeos, bien gestionados, constituyen un apoyo importante. La labor de los gobiernos debe ser generar un entorno económico y estructural en el que los emprendedores se sientan cómodos, seguros y con libertad de acción a la hora de crear empresas.
El potencial del sector de energías renovables está reconocido por el gobierno andaluz como uno de los motores principales de la reindustrialización, y el gobierno de España apoya también el tecnológico (la inversión del acelerador de partículas en Escúzar así lo demuestra)
Formación
Se están dando pasos para acomodar la formación de profesionales a las necesidades de las empresas. No obstante, hay que intensificar ese esfuerzo y promocionar entre los jóvenes el interés por las actividades profesionales que demanda el mercado.
La competencia global exige que las empresas sean capaces de adaptarse, flexibles para acomodarse a la demanda en constante evolución, y para ello es necesario contar con los profesionales que lo hagan posible.
Los acuerdos (tanto nacionales como internacionales) entre universidad / enseñanza de FP con empresas, en la medida que vayan orientados a formar en la práctica de las empresas a nuestros jóvenes contribuirán a crear un repositorio de talento que, posteriormente, reforzará la competitividad y la excelencia en las empresas granadinas.
Creación e Innovación
Crear e innovar son los dos procesos capaces de acelerar la industrialización de Granada.
La creación de nuevos productos de carácter industrial, sus desarrollos a partir de diseños industriales, es una labor ardua, que requiere, además, inversiones considerables y la asunción de riesgos importantes. Sus resultados suelen darse a largo plazo.
En el medio plazo, tenemos la innovación, como la materialización de una idea y su mejora a la hora de llevarla a la práctica.
Actualmente se está produciendo un cambio de paradigma en el mundo: al contrario de lo que sucedía hace no más de veinte años, China ha tomado la delantera en la innovación tecnológica tras una larga tradición de “copiar” los avances generados en Occidente. Hoy día, parece que es Europa y América quienes “copian” a China a nivel tecnológico, como vemos que sucede en la industria de la automoción o en la de generación de energías renovables (han desarrollado un nuevo material que convierte un 25,2% de la energía solar en electricidad y que permite fabricar placas solares de 3.2 mms. de grosor).
Si sabemos ver la oportunidad más allá del problema, tenemos un campo para aplicar nuestra innovación y generar mejoras a los productos de nueva creación. En esta vertiente, la innovación genera resultados más a corto y medio plazo, generando valor y utilidad para los usuarios.
Nuestra modesta contribución
SIMA ha sido pionera en el desarrollo industrial de Granada, con 54 años de experiencia y desarrollo. Los diversos cambios en los mercados, las crisis económicas y la evolución de las necesidades de nuestros usuarios han constituido lecciones de adaptación muy valiosas.
Creamos nuevos productos, como la trituradora de escombros TRITON o la cortadora de panel sandwich POLYPANEL, que empiezan a ser replicados por nuestros competidores. Pero también innovamos para mejorar nuestra gama y hacerla más versátil, útil y adaptada a las nuevas necesidades: es el caso de nuestra cortadora de suelos COBRA 45 PRO, que permite el uso de discos de corte de una amplia gama de tamaños, o la KERAMAX, una mesa de corte derivada de nuestro modelo VENUS y adaptada para corte de porcelánicos específicamente.
Creación e innovación para continuar creciendo.